G7 CONTROL DE SEGURIDAD
Su empleador le ha pedido que lleve la tecnología de monitorización de seguridad G7 para ayudar a garantizar su bienestar cuando trabaje solo. Los wearables G7 activan automáticamente una alerta de seguridad que permite a su equipo de supervisión gestionar una respuesta de emergencia a su ubicación exacta.
G7 incorpora comunicaciones inalámbricas y tecnología avanzada de posicionamiento para informar de una alerta de seguridad y señalar su ubicación en un mapa de Google. Al incorporar una radio inalámbrica, los dispositivos G7 transmiten datos periódicamente de forma similar a un smartphone o un teléfono por satélite.
SEÑALES DE RADIO
El uso de los teléfonos móviles ha llamado la atención de los consumidores y de los medios de comunicación por la preocupación que suscita la utilización de una tecnología que emite señales de radio cerca del cuerpo del usuario. El G7 se somete a pruebas para garantizar el cumplimiento de la normativa relativa a las señales de radio que comunican, al tiempo que se asegura que no haya interferencias con otros equipos electrónicos.
TASA DE ABSORCIÓN ESPECÍFICA
Para minimizar cualquier posible efecto sobre la salud, existe una normativa que limita la exposición de los usuarios a las señales. Esta prueba, denominada tasa de absorción específica (SAR), se realiza en un laboratorio acreditado con sofisticados instrumentos de medición. Los dispositivos G7 se someten a pruebas y cumplen estos requisitos de SAR para garantizar que transmiten las señales de acuerdo con la normativa.
COMUNICACIONES DE DATOS
G7 utiliza las comunicaciones de datos, enviando paquetes de datos muy pequeños a la infraestructura de control de seguridad de Blackline. La transmisión de estos paquetes de datos solo tarda unos microsegundos (millonésimas de segundo) en enviarse.
En comparación, los teléfonos inteligentes se utilizan habitualmente para aplicaciones de uso intensivo de datos, como la consulta de las redes sociales, la transmisión de vídeo, la correspondencia por correo electrónico y el acceso a Internet. El uso de datos de los smartphones se mide normalmente en cientos de megabytes o gigabytes al mes, mientras que los mensajes de datos del G7 pueden sumar solo uno o dos megabytes, lo que supone una cantidad de energía transmitida significativamente menor.
LLAMADA DE VOZ
Nuestros dispositivos G7c cuentan con una llamada de voz bidireccional opcional que permite al usuario hablar directamente con el equipo de vigilancia. Esta funcionalidad funciona de la misma manera que un teléfono móvil se utiliza para las comunicaciones de voz.
Hay dos factores que hacen que se transmita menos energía en general durante una llamada de voz en comparación con una llamada de teléfono móvil. En primer lugar, las alertas de seguridad se activan con menos frecuencia, lo que da lugar a menos llamadas de voz al personal de vigilancia. En segundo lugar, cada llamada con el personal de vigilancia suele ser de menor duración que una conversación típica por teléfono móvil. La cantidad acumulada de energía transmitida durante una llamada por un dispositivo G7 es significativamente menor que la de un teléfono móvil o un smartphone.
Aunque los dispositivos G7 cumplen las directrices sobre SAR, con una comunicación de datos relativamente infrecuente, paquetes de datos pequeños y llamadas de voz poco frecuentes y breves, los dispositivos G7 transmiten mucha menos energía que el uso de teléfonos móviles y smartphones. Además, el G7 no se sostiene normalmente junto a la oreja durante las llamadas de voz como lo haría un smartphone, lo que aumenta la separación entre la antena interna y la cabeza del usuario.
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